Funcionan como un ventilador normal y reducen la temperatura ambiental gracias a su sistema de evaporación de agua. Mejoran la calidad del aire, filtran la humedad y eliminan los olores ambientales. Tienen un bajo consumo energético.

Son un sistema de enfriamiento del aire por evaporación, es decir, bajan la temperatura de una estancia haciendo pasar aire caliente a través de un filtro húmedo que lo convierte en aire fresco. Se aconseja en casas con climas calientes y secos. Debe utilizarse en estancias con ventanas y puertas abiertas para renovar el aire, no acumular la humedad y ser eficientes. Además proporcionan aire fresco y limpio gracias a su sitema de filtrado.